Cuando vi el resultado, pensé: «No es cierto». Pero sí, sí era cierto.
Va y los ingleses votan por el «Yes» en el referéndum del Brexit (salirse de la UE, básicamente). Votos: 52% a favor del Brexit, 48% a favor del Bremain. En fin, así que parece que está claro: se van de la UE.
Pero no; lo que empezamos a ver es que cada vez más gente está revolucionándose dentro del Reino Unido, básicamente, porque se acaban de dar cuenta de la (con perdón) soberana estupidez que acaban de llevar a cabo. Vamos por partes.
Para empezar, las zonas que más han votado para cada una de las opciones han sido las siguientes:
Vemos que zonas como Gibraltar (96%), la City Londinense (75,3%) o Edimburgo (74,4%) son de las que más han apostado por quedarse; mientras que, por ejemplo, en Boston (ohmy, no tenía ni idea de que existiera uno en Inglaterra) el 75,6% de las personas quisieron abandonar la UE. Uno puede preguntarse:
¿Y por qué algunas de las zonas más conocidas del Reino Unido votaron por el Bremain?
Pues la respuesta es sencilla: porque eran las zonas más directamente beneficiadas por el modelo del Reino Unido. Pensemos brevemente lo siguiente:
¿Qué ha tenido hasta ahora el Reino Unido que lo haga… «importante»?
- Industria financiera. Desde hace unos cuantos años, lleva siendo un centro neurálgico en el tema financiero en Europa. Al parecer, en la City concretamente, se movía (según datos del 2014), el 40% de todas las operaciones de divisas, lo que aproximadamente equivaldría a un 40% de unos 5,3 billones (europeos) de dólares diarios. Echándolo a huevo, unos 2 billones de dólares diarios. Moco de pavo.
- Su moneda propia: la libra. Para variar, con un valor bastante alto para mantener a raya al euro, se podría decir.
- Su historia. A quién no le han intentado vender la figura de que el Reino Unido fue importante en su época, hizo grandes conquistas, etc. No sé, veo que son de los pocos que idolatran a piratas como tal y que han demostrado ser unos expertos en crear divisiones (véase Israel, Jordania, etc.).
- Su poderío con el inglés. No sé, hay días que me pregunto por qué el inglés parece la lengua vehicular de facto del mundo, y por qué me da la sensación de que los extranjeros debemos aplicarnos y aprender inglés, mientras que ellos no hacen lo mismo con otras lenguas mayoritarias para corresponder el respeto (español, chino, etc.). Según datos del 2013 del diario Telegraph, tres cuartos de los adultos del Reino Unido no pueden mantener una conversación en una lengua extranjera. Por otra parte, es impresionante la cantidad de dinero que obtienen distintos centros evaluadores de inglés con sus materiales, que al menos en España no son precisamente baratos: que si Student’s Books, Workbooks, Audio Samples, los exámenes, …
Y… ya. Alguien me preguntará:
Pero tuvieron importancia en el pasado con el tema de la Revolución Industrial, ¿no?
Obviamente, pero estamos incluyendo un factor importante: el pasado. España parece que también fue «importante» en el pasado, y así le fue, de culo y cuesta abajo, año sí, año también. Y la situación no pinta mejor después del super resultado de las votaciones del domingo pasado.
Por lo tanto, viéndolo fríamente, uno puede preguntarse qué gana el Reino Unido yéndose de la UE. Pensando un poco, veo que se matan a sí mismos en los 4 puntos anteriores, ya que:
- La industria financiera básicamente estaba en Londres porque se trataba de un lugar altamente privilegiado, con beneficios por parte de la UE que a ningún otro país se le habían dado. En el momento en el que la City pierda su posición estratégica, las empresas relacionadas con finanzas (que si bancos, empresas de fintech, etc.) simple y llanamente se desplazarán unos poquitos kilómetros, hasta irse a un lugar llamado Frankfurt. Vaya por Dios, no me lo esperaba.
- La libra estaba altamente apreciada (o sea, que tenía un mayor valor comparado con otras monedas) debido a la industria financiera del punto 1. En el momento en el que esta «estabilidad» de las entidades financieras desaparece, la libra se pega batacazos épicos en Bolsa. Realmente, tampoco me lo esperaba.
- La historia. Hasta el momento, la cultura anglosajona parece que ha conseguido crear una figura medio idílica dándole muuuucho, pero muuuucho lustre a sus partes buenas, e «ignorando» las partes malas; por lo tanto, parece normal pensar que su cultura es la mejor. Sin embargo, si uno se fija un poco más a fondo y si repara en la historia, podrá comprobar que conflictos como el actual de Daesh fueron creados gracias a las intervenciones, entre otros, de los hijos de la Gran Bretaña.
- Aquí también le ayuda su compadre EE.UU., pero pensando seriamente que el peso relativo de los diferentes polos del mundo está más equilibrado en la balanza (EE.UU / Europa (quitando al Reino Unido) / China), parece cada vez menos lógico pensar que el inglés se DEBA usar como lengua vehicular. Quizá como ya llevamos cierto tiempo aprendiendo inglés, y como se ha llegado a «estandarizar» como lengua de negocios, quizá se siga manteniendo, pero cada vez tiene menor base lógica.
Y por otra parte, también afecta negativamente a otros países, por ejemplo EE.UU., ya que ha provocado que pierda la ventaja relativa que tenía con respecto al yen y al yuan, y también puede afectar de rebote a otras monedas dependientes de estas, como es el peso mexicano, que ha vuelto a devaluarse a modo de reacción.
Pero algo positivo tendrá, ¿no?
Sí, bueno; al parecer, hay una serie de británicos que han conseguido sentirse más «independientes» al salirse del yugo sometido por Europa: parece que hasta lo quieren llamar el «Independence Day 2». Aunque técnicamente no lo serán hasta que no invoquen el Artículo 50 del Tratado de Lisboa.
Pero ya.
Lo que más tristeza me da, personalmente, es ver quiénes han decidido por quiénes. De los gráficos que se muestran en este enlace, quiero destacar uno en concreto: el referente a la edad de los votantes, y por otra parte, el de la pirámide poblacional del Reino Unido:
En un país en el que cada vez hay menos jóvenes (aaaaay cómo me recuerda a España…), se puede ver que los más mayores son los que más impacto tienen en la sociedad. Y así ha sido en el caso del Brexit. Se puede decir, pues, que los mayores han decidido el futuro de los jóvenes, cuando en sí lo lógico sería que dejaran a los jóvenes desarrollar sus ideas y tender al avance.
¿En resumen? Pienso que ha sido un hito histórico para los ingleses, ya que efectivamente pasará a la historia. Sin embargo, dudo que pase a la historia como un avance acertado; al menos, no se tratará de un avance que vaya a beneficiar al Reino Unido, porque lo que sí es cierto es que puede ser que la Unión Europea pueda hacerse más unida que nunca. Pero, finalmente, creo que veremos los estragos que pueden llegar a causar las actitudes de excesivo patriotismo y de falta de apertura a un mundo globalizado como el que es hoy, o lo que también se conoce como flema británica.