Bajo ese nombre más digno de un anuncio de clickbait de Internet que otra cosa (La Data Science inesperada; ¡echémonos unas risas!), di una charla en la Euskal Encounter 28 a finales del mes de julio; concretamente, el día 25/07/2020, en el frontón de Urretxu. Aquí puedes encontrar mi espacio promocional.

Haciendo una búsqueda rápida en Wikipedia, para quien no conozca la Euskal Encounter, se trata de la LAN Party más veterana de España, que se lleva haciendo desde el año 1994. De hecho, esta Euskal Encounter 28 (#EE28), «Revival – Beyond AI», tenía como temática central la IA y su impacto, en un mundo que ha sido afectado por el COVID-19.

Y he de decir que escribir estas líneas me resulta algo sorprendente. Nunca había estado en la Euskal Encounter, aunque era un evento al que siempre quise ir por diversos motivos. Y el hecho de estar como ponente en mi primera (aunque distinta, por el formato online) asistencia al evento me resultó en un subidón. Y esto es más gracioso aún cuando estuve tomándome unos buenos vermús con un buen amigo que ya me dijo: «Te llamarán a dar charlas, verás…». Curiosos guiños que tiene el destino.

Pero… ¿por qué estaba yo ahí?

La verdad es que no caí de rebote. El asunto es que desde hace varios meses estamos organizando entre Joxemari Gallastegi, Jesus Angel Bravo y yo mismo la venida de una comunidad de IA llamada AI Saturdays a Euskadi; tanto a Donostia como a Bilbao. Y debido a la relación obvia entre AI Saturdays y la temática de esta edición de la Euskal Encounter, decidieron contactarme a mí.

Y… ¿de qué iba la charla?

Quise hacer una charla algo atípica, que fuera algo más curiosa de ver/escuchar que otra cosa. El objetivo era entender aplicaciones no-productivas del proceso de Data Science, que utilizaran técnicas y algoritmos propios del análisis de datos y la IA. Para ello, analicé 3 ejemplos distintos:

  1. El Odiómetro: Un medidor del nivel de odio en Twitter mediante sentiment analysis.
  2. Meme Generator: Un generador de memes utilizando Redes Neuronales Convolucionales.
  3. Jukebox: Un transferidor de estilos musicales utilizando una combinación de un modelo VQ-VAE + Transformers Autorregresivos.

Y finalmente di unas pinceladas de los beneficios que podía aportar AI Saturdays a los participantes del programa. Aunque el contenido me gustó (pero era mejorable) en el directo, no se pudo apreciar bien por la calidad audiovisual (también mejorable). Por ello, decidí regrabarme en mi casa y colgarla en el canal de YouTube de Galde.

Dejo ambos vídeos para que apreciéis el que prefiráis (SPOILER: Prefiero mucho más la nueva grabación; en el directo hay un par de erratas de concepto).

VÍDEO 1: GRABACIÓN EXTENDIDA

 

VÍDEO 2: GRABACIÓN DEL DIRECTO

 

¿Con qué sabor de boca me quedé?

Fue una experiencia genial que me gustaría repetir más veces (aunque a poder ser, en formato presencial, no online). Este tipo de comunidades que acerca a las personas fanáticas de la informática, tanto a nivel profesional como a nivel más amateur, son un tipo más de comunidad que son necesarias y que hacen un bien social de valor difícilmente tangible. Me hubiera encantado que la primera grabación hubiera sido la definitiva, pero no es algo que no se pudiera remediar.

A su vez, me gustaría agradecer. 

Hace algo más de un año pensaba que esto de Galde se podría hacer realidad, pero no lo veía muy claro. Estaba haciendo los trabajos fin de grado de Administración y Dirección de Empresas (ADE) e Ingeniería Informática en la Universidad de Deusto, veía que había un espacio en el mercado para una herramienta como Galde FAQ, y pude incluso llegar a preparar un prototipo funcional.

En la actualidad, me he encontrado con una realidad algo distinta al papel. Empresas que, aunque entiendan y les guste el valor de la idea, quizá no están dispuestas a invertir en ella porque hay que hacer un gran trabajo previo (y de mantenimiento) para que la herramienta se pueda aprovechar al máximo. Empresas que, además, están haciendo lo posible para sobrevivir una fase de Coronavirus sin precedentes, de modo que no se pueden permitir el lujo de invertir en una herramienta algo «experimental» como puede ser Galde FAQ.

A pesar de ello, este feedback aparentemente negativo está dándome muchos aprendizajes, siendo los dos más relevantes:

  1. La herramienta de Galde FAQ es llamativa, pero hay que orientarla a otro tipo de empresas y/o contextos.
  2. La actividad de Galde no se puede centrar solamente en Galde FAQ, porque hay otras necesidades digitales más prioritarias en la sociedad por la crisis que vamos a empezar a vivir.

Misión: Galde como facilitador de soluciones digitales

De este modo, decidí orientar a Galde como un «facilitador de soluciones digitales», para un entorno que, por fortuna o desgracia, va a ser cada vez más digital.

Gracias al COVID-19, hemos entendido que muchas cosas que antes se daban como «inconcebibles» de realizar mediante la tecnología, se pueden hacer con ella. Sin duda, la «nueva normalidad» no va a ser la que hemos conocido hasta ahora; entre otros motivos, por diversos aspectos que he ido redactando a lo largo de estos años en la Bennytácora y cuyo efecto combinado se está empezando a percibir ahora en 2020 (conducción autónoma & servitización del mercado de transporte, cursos online de gran calidad, sistema de pensiones insostenible & renta básica, AGI o IA cada vez más general).

Ante este cúmulo de tendencias que se juntan (y más que vendrán por la combinación de estas), aprovecharé para hacer un poquito de promo de Galde explicando las 3 líneas de acción que va a tener Galde:

  1. Galde FAQ. La herramienta original, a pesar de ser conceptualmente innovadora, se mantendrá (y se reforzará) en la cartera de soluciones disponibles.
  2. Galde Web. Debido al COVID-19, mucha actividad social y laboral se hará en un formato mixto durante un periodo largo de tiempo, y es incluso probable que algunas de estas «manías» que adoptemos en este periodo se queden con nosotros. Este puede ser un buen momento para ver si necesitas llevar tu tienda física al mundo virtual, si el congreso/ponencia/evento que querías organizar puede hacerse mediante un webinar, mostrando la información relevante en una página web, etc. Si alguno de esos casos te resulta familiar y quieres que Galde te apoye en ese camino, mira las opciones que se ofertan aquí.
  3. Galde Apps. Al igual que en el punto 2, ves que aunque los marketplaces de Play Store (Google) o App Store (Apple) estén repletos de aplicaciones, te gustaría tener una aplicación que te permitiera gestionar algunos problemas recurrentes que tengas en tu día a día, independientemente a lo que te dediques. Aquí tienes un ejemplo de proyecto que Galde está trabajando.

Por lo tanto, si tú (o tu negocio/institución/entidad) se siente identificada con que alguna de estas tres líneas puede ser de interés, no dudes en escribir un mensaje a Galde rellenando este formulario; se te responderá lo antes posible a cualquier tipo de duda que tengas.

Pues sí, ese fue nuestro objetivo con la Gincanavirus: generar una herramienta o un juego que pudiera valer a las personas para estrujarse un poco la mente en este periodo surrealista de COVID-19 que nos ha tocado vivir.

¿De qué estoy hablando?

De la Gincanavirus. La Gincanavirus surge como una idea loca que tuvimos varios emprendedores de distintos ámbitos, con el objetivo final de generar algo que pudiera entretener a las personas, y a su vez educarlas, mediante una «lore» o «argumento» subyacente que trataba de apuntar a diversos problemas sociales que han hecho que suframos el COVID-19 tanto como lo estamos padeciendo hoy en día.

Y de hecho, surge de una manera muy rápida (y casi se podría decir que precipitada). Nos juntamos las 6 personas implicadas en videollamada (Ibon Reinoso, Sofía Moreno, Albert Juera, Unai García, Eneko Suárez y yo mismo), sin tener ni idea de qué hacer, y al cabo de 10 días, estábamos a punto de lanzar una gincana o conjunto de pruebas digital.

¿De qué va esta cosa?

La Gincanavirus consiste en pasarse una serie de pruebas, cuya información proviene de dos plataformas: una cuenta de Instagram (con alias @gincanavirus), y una página web expresamente preparada para ello. Aunque en teoría había cierta intriga por ir siguiendo la gincana día a día, a medida que el equipo organizador íbamos publicando las pruebas, diseñamos los contenidos de las pruebas y las dos plataformas para que cualquier persona que se anime en cualquier momento (durante el COVID-19, o incluso después del COVID-19) pueda jugar a este juego. Lo único que tendréis que hacer será seguir el orden cronológico de las publicaciones de Instagram (o no, pero entonces os perderéis pistas importantes y coherencia del juego).

GV19 Interfaces
Interfaces de la Gincanavirus (gv19.org a la izquierda, @gincanavirus en Instagram a la derecha).

Y es más, se puede decir que aquellas personas que juguéis ahora a esta gincana jugaréis una versión mejorada de la misma. Porque por fortuna o por desgracia, en nuestro equipo no había nadie que hubiera creado algo similar previamente, de modo que nuestros primeros días fueron de aprendizaje y adaptación. De hecho, tuvimos una buena acogida inicial por la novedad y lo diferente de la iniciativa, pero las pruebas resultaron muy difíciles para muchos jugadores, además de que la mecánica de juego se entendía poco. Por ello, optamos por modificarlas algo para hacerlas más comprensibles y que las pruebas fueran más accesibles para todos.

Como parte de estas modificaciones, en breve podréis ver un «roadmap» o «mapa de juego» que os pueda orientar por el orden de las pruebas, por si os queréis pegar una maratón y hacerlas de golpe.

¿Y qué he sacado yo de aquí?

Por de pronto, conocer a gente genial con la cual se puede trabajar aun en una situación bastante ambigua y a contrarreloj. No sé cómo hubiera sido el desarrollo de esta iniciativa si no hubiera contado con este equipo multidisciplinar, pero me inclino a pensar que hubiera resultado en un fracaso rotundo.

A su vez, a entender una misma situación desde diferentes perspectivas y empatizar con el jugador. Mientras en el grupo organizador discutíamos las pruebas que íbamos a ejecutar, algunas nos parecían muy fáciles, mientras que los usuarios sufrían mucho al hacerlas porque no veían el truco que estaba detrás. Y a la inversa; en otras pruebas que considerábamos más difíciles, los jugadores nos sorprendían gratamente y llegaban a conclusiones totalmente inesperadas (de hecho, una de las últimas publicaciones de @gincanavirus es precisamente una recopilación de las Top 10 conclusiones más sorprendentes).

Finalmente, diversión. Tanto por el equipo organizador, como por hacer algo que no había hecho nunca, como por las reacciones de algunos jugadores que nos consultaban sus teorías sobre diferentes pruebas. Realmente ha sido un gusto hacerlo, y volvería a hacerlo, sin duda alguna.

En resumen…

Si has llegado a leer hasta aquí, y si puedes hacer algo de tiempo en este periodo de cuarentena (o fuera del mismo, si me lees en el futuro) te animo a que lo juegues y que extraigas tus propias conclusiones sobre la Gincanavirus. Si eres una persona que te gustan los retos intelectuales, eres detallista, o encuentras patrones donde no los hay, la Gincanavirus puede ser para ti.

 

Hace un año justamente estaba en Santa Clara, California, EE.UU., con otros 5 compañeros más de Deusto (haciendo un poquito de investigación en mi Instagram / Facebook podréis saber quiénes son), en nuestra estancia internacional en Santa Clara University.

[Aprovecho esta entrada pues para publicar el contenido completo que envié para publicar en el blog de Innovandis, dado que tuvieron que hacer algunos recortes en lo que a imágenes respecta.]

La experiencia en Santa Clara ha sido como un soplo de aire fresco para mi persona. No ha sido una experiencia meramente académica (aunque cabe decir que las clases recibidas han sido excelentes), sino que ha sido una experiencia vivencial en el más amplio sentido:

  • Por un lado, he conocido diferentes patrones de conducta y maneras de entender la vida, gracias a alumnos de la universidad de diversas ramas del conocimiento, además de a inmigrantes que se han establecido en Silicon Valley por ser la referencia de innovación a nivel mundial.
En Googleplex, Mountain View, el HQ de Google. Octubre 2018. Fuente: Imagen propia.
  • Por otra parte, he podido hacer bastante networking gracias a sugerencias de amigos y en eventos organizados en la Bahía de San Francisco, entre otros, en el TechCrunch Disrupt, San Francisco 2018 y en el Evento de Networking para Latinxs en el HQ de LinkedIn.
En TechCrunch Disrupt, San Francisco 2018. Septiembre 2018. Fuente: Imagen propia.
  • Además, he tenido la experiencia de poder convivir con gente con la que el trato ha sido muy agradable, aunque hubiera momentos difíciles de superar.
En Santa Clara University, Santa Clara. Diciembre 2018. Fuente: Imagen propia.
  • Encima, he podido contrastar ideas de negocio que tenía para mi Trabajo de Fin de Grado de ADE, así como encontrar pequeños detalles que me complementaran a la idea que nuestro equipo había estado trabajando en iNNoVaNDiS.
En TechCrunch Disrupt, San Francisco 2018, escuchando a Ben Horowitz hablar sobre criterios que él aplica a la hora de invertir en proyectos. Septiembre 2018. Fuente: Imagen propia.
  • Finalmente, he podido viajar por Estados Unidos, y no solamente conocer California, sino también Nueva York, Boston y Chicago.
En el Top of the Rock, Nueva York. Diciembre 2018. Fuente: Imagen propia.

Por ello, me llevo:

  • Amigos y contactos.
  • Conocimiento académico.
  • Contrastes valiosos de ideas y perspectivas.
  • Y una buena dosis de diversión.

En resumen, una manera más amplia de entender mis ámbitos personal y profesional, y una manera de desarrollarme como persona.

En Mount Tallac, Lake Tahoe, California. Octubre 2018. Fuente: Imagen propia.

[Antes de nada, este post lo escribí para el blog de Innovandis en esta dirección. He dejar constancia de este post en mi blog para la posteridad :-)].

Introducción

Uno de los momentos en los que te das cuenta de que tu etapa universitaria está llegando a su fin es cuando tienes que desarrollar tu “trabajo fin de grado”.  Un Trabajo de Fin de Grado (TFG) no es una tarea precisamente trivial (al menos, el mío no lo fue). Esto es así, dado que:

  1. El trabajo debería ser equivalente en nivel de esfuerzo a una o varias asignaturas (dependiendo del Plan de Estudios de tu facultad / universidad) de tu grado.
  2. El trabajo debería intentar aglutinar la mayor cantidad de conceptos posibles de tu grado de manera coherente, o al menos, del área que estés trabajando.
  3. Es un trabajo autónomo. Aunque estés guiadx por un/a tutor/a, tienes que trabajar mucho por tu cuenta, o en grupo, para poder sacar el proyecto adelante.

A través de este post quisiera compartir los baches a los que me tuve que enfrentar en este camino y que, finalmente, me han llevado a conseguir el Premio Sebastián Iruretagoyena al “Mejor Trabajo de Fin de Grado en Administración y Dirección de Empresas (ADE)” de la Promoción 2018-2019, creado en honor al difunto profesor Sebastián Iruretagoyena.

Este premio, concedido por un grupo de amigos del que fuera profesor de la ESTE, Sebastián Iruretagoyena y por su familia, pretende resaltar la figura del profesor Sebastián Iruretagoyena, que enseñó durante muchos años en la ESTE y fue el primer director del MBA Ejecutivo. El premio valora la excelencia académica del proyecto, la cercanía y valor aportado a la realidad empresarial, y el impacto económico, social y medioambiental del mismo.

De izquierda a derecha, David Iruretagoyena (hijo de Sebastián), Marina Mendicute y Ainara García (falta José Luis Escobar), ganadorxs del Premio Sebastián Iruretagoyena en la modalidad «Mejor Análisis Económico-Financiero», y yo, en la modalidad «Mejor TFG de ADE junto a y Luis Bastida (representación de los amigos de promoción de Sebastián)

a. [OPCIONAL] Tener una idea previa.

En mi caso, yo tenía claro que quería usar el TFG de ADE para testear una idea que me iba rondando por la mente desde hacía algo más de un año. Esta idea estaba orientada a una empresa basada en un software de visión artificial o visión por ordenador. Para ello, había hablado de esta idea antes con familia, amigxs, mentorxs del Título Propio de Innovación y Emprendimiento (iNNoVaNDiS) de la Universidad de Deusto y con mis superiorxs en la empresa donde realicé mis prácticas, y tenía unas mínimas nociones de por dónde iban a ir los tiros.

[Obviamente, esto solamente aplica a aquella gente que quiera hacer un TFG de Creación de Empresa con idea propia].

b. Contactar cuanto antes con tu tutor/a.

Dependiendo de lo animadxs que seáis, haréis el trabajo con más o menos gente (yo tuve la opción de hacerlo de manera individual, lo que no significa hacerlo de manera aislada, porque fundamenté de manera sólida mi idea previa a la hora de presentar la solicitud para el proyecto).

Pero excluyéndoos a vosotrxs y/o a lxs miembros de vuestro equipo, la persona a la que debéis contactar es vuestrx tutor/a. Esta persona va a estar con y para vosotrxs durante todo el desarrollo del TFG. Sin embargo, dependerá sólo de vosotrxs el aprovechar todo su potencial, que en la mayoría de los casos es muy superior al que te puedas imaginar, en base a lo que hayas podido ver durante las asignaturas de grado. Tal y como decía antes, este es un trabajo autónomo, de modo que aprovechar los recursos que están a vuestra disposición es parte de lo que se espera de vosotrxs.

c. Planificar con cierta exigencia.

Dos cosas que a mí me ayudaron a pivotar y a dar los resultados correctos en el tiempo esperado trabajando de manera individual fueron:

  1. Empezar el trabajo un poco antes. Si tenéis oportunidad de hablar con la empresa/institución que os asigna el proyecto con cierta antelación y no os rompe ningún otro plan personal que tengáis, hacedlo. Yo pude usar un par de semanas antes de empezar el semestre para empezar a dar forma al modelo de negocio y reflexionar.
  2. Ser pesimistas en la planificación. Seamos realistas, muy poca gente cumple los hitos y fechas de entrega establecidos al 100%, porque puede haber mil imprevistos que no vamos a ser capaces de predecir, pero que nos va a alejar del objetivo que nos habíamos planteado para el período en el que debemos ser capaces de desarrollar el trabajo. Intentad establecer vuestras fechas límite algunas semanas antes de la fecha límite real, de manera que no os pille el toro en el último momento.
Literalmente, que no os pille el toro. Fuente de la imagen: La Publicidad.

d. Disfrutar con el reto.

Entiendo que puede haber ciertos proyectos que se os asignen de manera más o menos arbitraria, pero si tenéis la opción de trabajar en algo que habéis definido vosotrxs mismxs porque es algo que os motiva, y que tenga potencial para generar un impacto real, aprovechad esa oportunidad. No hace falta insistir en que sarna con gusto no pica.

e. Aceptar las desviaciones (porque las habrá).

Si me preguntarais de qué trataba mi TFG, mi respuesta antes de empezarlo y al acabarlo serían radicalmente diferentes. Mi respuesta antes de iniciar el TFG era una aproximación algo ambigua, incluso naíf, al verdadero problema – algo que como negocio era absolutamente inviable.

No obstante, en base a las preguntas propuestas por mi tutor (Ricardo Vea), por mis amigxs, por mis compañerxs de trabajo, etc. supe que no estaba yendo por el buen camino: estaba “inventándome un problema para resolverlo”, y no “inventándome una solución para resolver un problema existente”.

A partir de ahí, tuve que pivotar de manera bastante seria, repetidas veces, para poder llegar a una solución válida, y de ahí poder construir el modelo de negocio final. Por lo tanto, el tiempo adicional que preveía en mi planificación lo acabé usando casi completamente.

f. Usar las opciones disponibles.

Una vez más, insisto en esto. Me entrevisté con diversas personas, organizaciones; pasé encuestas repetidas veces en empresas del sector para obtener información fiable, etc. Si el proyecto os motiva, intentaréis hacer lo que sea para hacerlo bien, y no os olvidéis de usar las opciones que se os presenten (obviamente, siempre desde el respeto y la confidencialidad).

g. Preparar un buen pitch.

Una vez hayáis hecho la parte más dura del trabajo, no os olvidéis de presentarlo de manera limpia, agradable, clarificando y consensuando los criterios y contenidos sobre los cuales poner énfasis con el/la tutor/a y coordinadora de TFGs. Esto os ayudará a completar vuestra nota; la cual, si habéis hecho un trabajo decente, será bastante alta.

Y eso es todo, así que, sin más dudas, ¡a por ello!

¡Nuestro selfie!

Escándalos y situación

Uber, además de relacionarse con facilidad, se ha relacionado asiduamente con escándalos. Ha habido muchos episodios de ellos:

Etc. Esto lleva a pensar que las empresas de transporte privado, con su negocio disruptivo, generan problemas.

No obstante, hay que destacar que Uber, al igual que otros negocios de ride-hailing, están renovando el mercado de la movilidad para hacerlo más accesible al usuario de a pie.

Según datos en su página oficial, Uber emplea a 16.000 empleados, y cuenta con una flota de 3 millones de conductores en todo el mundo. Así pues, la “plantilla fija” de Uber es el 0,53% de todo el conglomerado de personas que forman Uber.

Pero cabe recordar que, a pesar de que Uber sea el medio de transporte privado más mediático, no es el único en el mercado. También existen otros como Didi en China, Cabify, Lyft o Gett (que adquirió a la empresa Juno por 200 M $), lo que hace que el volumen de conductores dedicados a este tipo de negocio sea mayor.

Y, por lo tanto, tampoco es de extrañar que los taxistas hayan entrado en cólera. El motivo es sencillo: los competidores, que aparentemente ofrecen un servicio que es más preferido por los clientes, son la primera opción de las personas que buscan una solución de movilidad. Todo ello sin tener que pagar previa licencia de taxista.

A pesar de la evolución de las empresas del sector, cada vez los potenciales conductores miran con mayor recelo dedicarse a esta actividad. ¿Por qué?

Según un hilo de Quora, hacia 2014, los conductores de Uber recibían una mayor cantidad de dinero por cada trayecto realizado. No obstante, con el paso del tiempo y con la presión de la competencia, más gastos y comisiones se han ido añadiendo, lo que ha provocado que, para muchas personas, ya no sea tan rentable dedicarse a conducir Uber como profesión. Y un comentario similar se podría hacer sobre competidores como Lyft.

Posible futuro – “El viaje como servicio”

No obstante, a pesar de que el sector de transporte privado haya sido revolucionario, se puede pensar en la manera de generar disrupción en él. Y la verdad, con la tendencia incipiente a poder ver coches eléctricos y autónomos, se puede ver que habrá un serio competidor de estas aplicaciones: los propios fabricantes de vehículos.

Varias compañías están desarrollando funciones de auto-piloto (así como Tesla o Waymo), y se están aliando con fabricantes establecidos (por ejemplo, Waymo y Fiat – Chrysler) para poder ofrecer esta experiencia de conducción autónoma. En este caso, lo que se podrá pensar fácilmente será en ofrecer “el viaje como servicio”.

Es decir, no sería descabellado pensar que una persona tenga un coche y que este coche esté dando vueltas, de manera autónoma, generando ingresos pasivos para su propietario. Y tampoco sería descabellado idear que las empresas fabricantes de coches generen una vertiente de negocio para ofertar servicios como Uber, Cabify, Lyft o Gett de manera casi inmediata. Esto sería posible dado que ya poseen los coches y la tecnología para que se conduzcan – únicamente requiriendo de pasajeros.

Por lo tanto, esto cuestiona el modelo de negocio de las actuales aplicaciones de transporte privado. Porque, por tomar un ejemplo, en el caso de Uber, buena parte de los vehículos son propiedad de los conductores, no de Uber. Esto generaría 2 conflictos serios para Uber:

  1. Forzaría a Uber a realizar una inversión en inmovilizado bastante grande, para poder seguir abasteciendo al mercado que ya tiene.
  2. Tendría que deshacerse de una gran cantidad de conductores actuales de Uber, lo que daría pie a conflictos con ellos.

Aunque, haciendo una rápida reflexión, se podría pensar que están tratando de mitigar el segundo conflicto, ofreciendo menores incentivos para los conductores de Uber, y así haciendo que no lo consideren como una opción de empleo tan atractiva como lo fue en el pasado.

Finalmente, una última vertiente de conflicto relacionada con el segundo conflicto podría ser la del asociacionismo de los conductores. Aún no se ha generado una asociación o sindicato de conductores, pero vista esta tendencia, es posible que sea un movimiento absurdo.

Esto es así por el hecho de que este tipo de tecnologías están avanzando muy rápido, y para el momento en el que se consiga un conjunto de conductores que estén asociados de una manera más o menos coherente, el rol de estos dejaría de ser tan importante en este sector.

En resumen

Entramos en un momento en el que se puede ver cómo un sector que da de comer a bastantes personas tiene altas probabilidades de transformarse en pocos años, dejando a muchas personas implicadas desempleadas. Y esta no es otra seña más de la volatilidad que tiene la economía actual.

Volatilidad que parece creciente a medida que la historia avanza, y que posiblemente vaya a generar shocks recurrentes en el mercado de trabajo, salvo que no se empiecen a idear modelos de economía alternativa que sean capaces de contemplar (y evitar) este tipo de shocks.

Listado de empresas dedicadas al ride sharing
Fuente: GBKSoft

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